Pilar es una mujer que emprendió su recorrido de expatriación antes de ser mamá. Vivió en México y fue allí donde comenzó su camino en la maternidad, siendo madre soltera y viviendo lejor de su familia. En estos momentos vive en Brasil y desde allí comparte su experiencia.

  1. ¿Cuánto tiempo llevas siendo mamá expatriada?

Soy expatriada fuera de mi país Argentina, desde hace 11 años. Siendo mamá hace 3, desde que nació mi hijo Dante, vivíamos en México. Ahora nos mudamos a Brasil.

2. ¿Qué ha sido a lo que más te ha costado adaptarte?

La distancia con la familia. No poder compartir muchos momentos, solo por semanas o algunos días, cuando nos visitábamos, pero no la cotidianeidad.

3. ¿Cómo es un día cualquiera en tu familia?

En casa somos 2, yo y mi hijo. Soy mamá soltera, desde el embarazo fue así. Trabajo todo el día, así que un día normal significa él en la escuela-guardería, yo al trabajo. Son muchas horas que estamos separados, así que al retornar a casa disfrutamos cenar juntos, jugar un rato y descansar. Y salir a pasear a nuestra perrita Frida.

4. ¿Qué importancia le otorgas a la adaptación a la nueva cultura y sociedad? ¿Cómo crees que repercute en el crecimiento de tus hijos y su desarrollo?

Uf, muchísima. Por empezar para mí, entender la cultura, relacionarte con otra gente y a partir de allí transmitir eso al niño. Estar en contra de otra cultura no ayuda en nada, no entender por qué y cómo hacen las cosas en otro país se hace muy difícil. Por dar un ejemplo, en México se festeja el Día de Muertos y los niños hacen calaveras desde la sala de bebés. Entender esa tradición me ha permitido acompañarlo en los festejos en la escuela y que los viva como algo natural. También es importante mantener las tradiciones de Argentina, de su familia materna, mi familia. En casa festejamos el día de la madre argentina, el día de Pascuas y comemos cosas tradicionales de allí y tomamos mate. El aprende en esa diversidad y me parece que es enriquecedor para él. Y se hace más llevadero para los dos.

5. ¿Cuáles dirías que son las ventajas y las desventajas de criar a un hijo en un lugar como el que vives?

Para mí fue una ventaja vivir en soledad muchos momentos difíciles pero me dio tranquilidad. El posparto, el regreso al trabajo, la cuarentena. Decidir por mí misma. Me armé de organización y estrategias de cuidado personal. El tener la obligación de defenderte sola, salir adelante en situaciones donde quizás llamarías a la familia pero al no estar cerca debes defenderte, confiar en tu instinto. Ayuda mucho al empoderamiento.

La desventaja, como yo lo veo, es que el tiempo pasa rápido, y perderse esos momentos de compartir en familia duele. Mantener la relación virtual es un desafío para que los niños conozcan a las familias. No siempre recuerdan a todos.

6. ¿Qué lugar otorgas a la herencia cultural en la educación de tus hijos? Hablan español en casa, comen comidas de tu país, escuchan música de tu niñez…

Le doy mucho lugar, por el motivo que yo misma las sigo, por gusto, costumbre y por anclajes con mi tierra, familia, amigas. El las copia. Creo que enriquece mucho su conocimiento, el entender que no hay solo una realidad, que el mundo es diverso y amplio y las ganas de conocer más.

7. ¿Te ha sido fácil encontrar un espacio y proyecto personal y profesional en otro país?

Profesionalmente sí. De hecho es lo que me ha llevado a salir de Argentina hace 11 años. Nunca he dejado de tener trabajo estando expatriada. Me he movido incluso entre empresas locales e internacionales. Primero fue en México y ahora en Brasil.

El foco ha estado siempre en el trabajo. Siendo madre soltera se me ha cerrado un poco más el tiempo personal. Pero con el tiempo lo he logrado, como por ejemplo en mi blog, también he escrito dos cuentos, uno espero poder publicarlo pronto.

Muchos cambios juntos, la mudanza, luego nos tocaron inundaciones, la cuarentena, el aislamiento. Se nos está haciendo más difícil por el idioma.

8. ¿Crees que diferentes países de expatriación requieren de una actitud distinta? ¿Cuál es el mejor consejo que podrías dar a otra mamá que piensa en irse a vivir a otro país?

Creo que si, dependiendo del país, la actitud es diferente, no es lo mismo si el idioma es otro. Pero al final, el concepto es el mismo, la apertura a la cultura local, a la gente del lugar, la lectura y entendimiento de un idioma, historia y tradiciones.

Como consejo que me ha servido mucho es estar en grupos de personas afines, como mamás extranjeras en un determinado lugar.  Grupos que se encuentran en cada país, Facetime, Whatsapp… Te va llevando a mujeres que viven o vivieron lo mismo y la empatía siempre ayuda. Sirven consejos y recomendaciones, mas aún cuando estas recién llegada, ayuda para ir entendiendo la dinámica de cada país. No estar solo, incluso aunque sea expatriada en pareja, para tener tus espacios y encontrar amigos locales. Armar tu familia dentro del país donde uno vive.

Gracias Pilar por compartir tu relato como mamá soltera por Latinoamérica.

Pueden seguir a Pilar en Instagram: @actitudmontessori

Saludos,

Erica