Me he dado cuenta de los vicios que tengo como expatriada a pesar de que los años van pasando. No hay nada que hacer, uno es quien es, y la expatriación te transforma pero la esencia está allí!

Por eso se me ha ocurrido, el Decálogo de la Madre Expatriada, una lista de cosas que nos identifican, en todas las latitudes. 

No hay escapatoria, en algún momento pasarás por uno, sino todos a la vez:

    •  ARREGLATELAS SOLA, NO CONTARAS CON AYUDA.
    •  HABLARÁS MAL TU PROPIO IDIOMA, MEZCLANDOLO CON EL IDIOMA LOCAL.
    •  HABLARÁS AUN PEOR EL IDIOMA LOCAL, QUE LO MEZCLARÁS CON EL PROPIO,     MÁS TEMAS DE PRONUNCIACIÓN Y AFINES.
    • TE INTEGRARÁS A LA NUEVA SOCIEDAD, ASÍ TENGAS QUE PARTICIPAR EN EVENTOS INDESEABLES.
    • AGUANTATE LAS GANAS DE COSAS RICAS DE TU PAÍS.
    • TE SENTIRÁS COMO SAPO DE OTRO POZO EN LA MITAD DE LAS CONVERSACIONES.
    • NO TE DESCONECTARÁS DE LAS REDES SOCIALES PARA PODER CHATEAR CON TU FAMILIA Y AMIGOS.
    • LEERÁS PRIMERO LAS NOTICIAS DE TU PAIS Y NO LAS DEL DE TU LUGAR DE RESIDENCIA.
    • TE SUSCRIBIRÁS A LAS PROMO DE VUELOS  ‘ACTUAL CIUDAD-CIUDAD DE ORIGEN’
    • TE AGUANTARÁS LA SOLEDAD EN VARIOS ÁMBITOS.
    • ATOSIGARÁS A TUS HIJOS CON UNA MEZCLA DE COSTUMBRES LOCALES Y TRADICIONES DE TU PAÍS DE ORIGEN.
    • APRENDERÁS A EXTRAÑAR MUCHISIMO Y SOBREVIVIR A ELLO.
    • DISFRUTARÁS DE AVENTURAS FAMILIARES INSOSPECHADAS.

Tu actitud es lo que cambia la manera de enfrentarte a las circunstancias de la vida, expatriada o no, las cosas pasan, pero al estar lejos las cosas toman otra dimensión.

Si me estuviera tomando un café contigo te diría que no hay fórmulas mágicas para la felicidad, ni lejos ni cerca de tu lugar de origen.

Teniendo claro como quieres enfrentarte a este decálogo de la madre expatriada, puedes lograr una mejor experiencia. Yo llevo 22 años en la mía y he experimentado de todo.

¿Qué agregarías al listado?

Saludos,
Erica
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