¡Hola a todas! Me llamo Sole, tengo 36 años y vengo de Argentina. Soy Licenciada en administración de empresas y trabajé más de 12 años relacionada a mi carrera.
Hace dos años, por el trabajo de mi marido, partimos a Hamburgo, Alemania. Dejé mi trabajo en Buenos Aires, en el diario más importante de la Argentina, y con la incertidumbre de qué iba a pasar con mi profesión y nuestras vidas, llegamos a tierra teutona.
Por suerte Hamburgo es una ciudad preciosa: muy verde, muchos canales de agua, lagos hermosos y el famoso río Elba. Se caracteriza por ser tranquila y segura pero a la vez con mucha ‘movida’ cultural, gente joven y lugares para comer cosas ricas (una de mis pasiones es ser una guía gourmet viviente!)
El transporte público es una maravilla y andar en bicicleta sin tener problemas con autos y vehículos en general fue lo que más me enloqueció. Una ciudad con mucho respeto por el otro.
Al principio la novedad de lo desconocido hace que todo sea muy divertido pero lógicamente con el tiempo se empieza a tener una rutina y eso da paso a sentir la falta de los seres queridos. Para cuando eso sucedió quedé embarazada y la adrenalina comenzó nuevamente.
Mi embarazo fue tan bueno que me sentía todopoderosa y súper inspirada, así fue como nació mi blog sobre decoración, otra de mis pasiones. La idea me comenzó a rondar en la cabeza cuando veía cosas tan lindas en esta ciudad y en las que visitaba por Europa, con tan buen gusto y sentido de la estética.
Pensé que quería abrir en el blog una ventana al mundo contando sobre recorridos deco a través de mis viajes, DIY (Do it yourself), Hamburgo y sus estilos (Influencia Bauhaus, muralismo, etc). Les presento entonces a Dekoholic! y las invito a pasar a dar una vuelta.
Hoy Tomi tiene 2 meses y medio, es el sol de mi vida y me tiene loca de amor. Por supuesto continuo con mi blog y si bien mi carrera no la pude continuar como pensaba por la llegada de mi baby, el blog me da ese espacio de desarrollo que tanto necesito y además con el beneficio del «working from home».
Después de dos años puedo decir que estamos adaptados. El idioma cuesta, las distancias culturales y estar lejos de la familia y amigos también, pero como siempre digo ¡uno es más fuerte de lo cree y puede con lo que hasta no imagina!
Sole
Lindisimo todo lo que contas!
Enhorabuena te has adaptado genial, y muy rápido¡ mucho mérito con culturas tan distintas
Animo con tu vida y tu blog. Un saludo.